Por enésima ocasión, navieras de carga vuelven a hacer de las suyas con los usuarios.

-Durante el periodo vacacional, volvió a dejar a cientos de automovilistas varados en Punta Venado, dándole preferencia a los que reservaron previamente.

PLAYA DEL CARMEN, Q.ROO, 2 de enero.- Las dos empresas navieras que ofrecen el servicio de transporte vehicular y de carga vuelven a quedar en evidencia como compañías abusivas y usureras, al seguir haciendo lo que quieren con los usuarios no solo al no abrir mas horarios de salida para atender la demanda, sino además darle la preferencia a aquellos usuarios que reservan con anticipación, dejando a los que no lo hicieron a esperar varias horas hasta que haya lugares disponibles.

Pese a ser dos empresas dedicadas al ramo del transporte de carga vía marítima desde el macizo continental hacia la Isla de Cozumel y viceversa, ninguna de las dos ha tenido la voluntad de abrir mas horarios de salida para abatir la demanda que se llega a registrar no solo en las temporadas vacacionales, sino incluso en temporadas regulares, donde en determinados horarios se eleva el volumen de vehículos que desean cruzar hacia la ínsula, lo cual se traduce en que los usuarios tengan que esperar hasta el siguiente cruce o bien, hasta que los barcos tengan disponibilidad de cupo.

Y es que desde que inició la pandemia en marzo de 2020, las dos navieras -Transcaribe y Ultramar- limitaron sus operaciones a únicamente el traslado de carga y víveres, pero conforme la actividad se fue reactivando en los meses siguientes y en un descarado contubernio, ambas empresas acordaron “turnarse” los horarios de salidas, además de implementar un sistema de reservaciones con el que en resumidas cuentas, se le da preferencia de cupo al usuario que pague mas, haciendo con ello su “agosto” en pleno enero.

Este sistema ya ha generado inconformidad entre los usuarios, en especial a los foráneos que provienen de otros estados, pues con este “novedoso” mecanismo, no solo se les está relegando a aquellos automovilistas que cuentn con recurso limitado o simplemente no saben de este sistema, sino que además los somete a largas y kilométricas horas de espera, las cuales pueden ir desde un par de horas, hasta incluso 15 horas de espera para poder llegar a la insula.

Lo anterior ha desencadenado en serios inconvenientes para los usuarios que quedan varados, pues no les queda de otra mas que permanecer en la fila para asegurar su lugar y cupo, sin darles oportunidad de poder acudir a algún supermercado a comprar alimentos, ya que el sitio que opera como terminal marítima, -que de terminal solo tiene el nombre- no cuenta con instalaciones dignas, sometiendo a sus usuarios a esperar su turno de cruzar, sin importar las horas que tengan que esperar.

En diciembre pasado, varios usuarios permanecieron mas de 12 horas varados en Calica debido a que ni Transcaribe ni Ultramar les permitieron cruzar debido a que ya habían llegado sus embarcaciones a su máxima capacidad, pero como además no habían reservado con tiempo, tampoco se les permitió abordar, lo cual consideran un abuso, pues se le está dando al usuario que les da a ganar mas.

Incluso en la temporada vacacional aun en curso, también se suscitaron algunos inconvenientes parecidos, lo que generó molestia entre los automovilistas que tuvieron que esperar varias horas para poder cruzar. Aun con ello, ninguna de las dos compañías abrió salidas extras.

Lo anterior es una muestra no solo del pésimo servicio por parte de Transcaribe y Ultracarga, quienes por convenir así a sus intereses económicos, prefieren mantener a sus usuarios como rehenes y a su disposición, en lugar de abrir mas horarios siendo dos compañías las que ofrecen este servicio, sino además es muestra del abuso y discriminación por parte de las mismas, al cobrar una tarifa mas alta a quienes reservar con anticipación un lugar para garantizar su llegada a casa en tiempo y forma, manteniendo a sus usuarios prácticamente secuestrados.